La rehabilitación animal es muy parecida a la fisioterapia de personas, aplicada durante muchos años en situaciones ortopédicas o neurológicas. En los últimos años los mismos recursos se están aplicando en animales con resultados muy satisfactorios. Las técnicas utilizadas son parte de la terapia manual, la cinesiterapia y los agentes físicos, incluyendo la hidroterapia.
Enfermedades ortopédicas como displasia de cadera y codo, artrosis, tendinitis y contracturas musculares.
Enfermedades neurológicas como hernias discales, parálisis, cauda equina, síndrome de Wobbler, lesiones de nervios periféricos y mielopatia degenerativa.
Pre y post intervención quirúrgica de traumatología o neurología.
Estimulo de cicatrización de heridas cutáneas.
Animales geriátricos, obesos y deportistas.